¡Hoy en Tutéate empezamos la semana con otra idea de reciclaje de diseño! Avisamos: id guardando los tapones de corcho de las botellas de vino porque cuando veáis esta original propuesta también la vais a querer crear.
El proyecto de hoy es una alfombra de baño para la toalla de pies que hemos encontrado en Craftynest. Se trata de un concepto que ya existe con esterillas de madera y que ayuda a que las toallas de pies no queden tan húmedas y duren mucho más. Si decidís sumaros al movimiento «eco-chic» con esta bonita solución, a continuación os dejamos el tutorial.
Material necesario:
– 150 tapones de vino (¡organiza una buena fiesta!)
– Cuchillo (o navaja afilada) y tijeras
– Regla grande o tabla de medidas
– Pistola de pegamento o silicona
– Forro antideslizante para estantes y cajones
– Papel de lija y barniz (opcional)
Pasos a seguir:
1- Cortar longitudinalmente cada tapón de corcho por la mitad. Hazlo cuidadosamente para que las dos partes queden lo más iguales posibles. Lija un poco la cara plana de cada mitad en caso que te haya quedado irregular.
2- Colocar todas las mitades con la cara plana hacia abajo y organizadas para formar, en conjunto, un rectángulo. Medimos para ver si tiene las dimensiones deseadas (tomamos de referencia nuestra toalla de pies). En este caso, el rectángulo medía 47 cm de alto por 76 cm de ancho.
3- Cortar el forro antideslizante para que tenga el mismo tamaño que el rectángulo de corchos que tenemos preparado.
4- Encolar las mitades de corcho a la superficie antideslizante. Se recomienda empezar marcando todo el exterior del rectángulo y a continuación ir rellenando el interior. Presionar un poco el corcho contra la superficie cuando lo enganchemos, para asegurar la fijación.
5- Cuando tengamos todas las piezas encoladas, dejamos secar unas horas nuestra nueva alfombra (mejor si encima podemos colocar algunos libros que pesen un poco o algún otro objeto que presione y facilite la fijación).
6- Finalmente, podemos barnizar el conjunto si queremos hacerlo más resistente. Este paso es totalmente opcional, puesto que el corcho es muy resistente a la humedad y es por eso que llevan tanto tiempo usándolo como tapón para botellas.