Hay diversas situaciones en las que las flores pueden ser un buen acompañante o una bonita sorpresa: para San Valentín, para el día de la madre, para ornamentar una boda,… Y una forma fácil y duradera de obtener flores es haciéndolas con telas (y, cómo no, podemos aprovechar la tela de una blusa o camisa que ya no usemos).
En Tutéate ya hemos compartido dos artículos explicando cómo hacer broches en forma de flor: preciosas dalias y flores de 6 pétalos. Hoy explicaremos cómo hacer rosas, las flores que más asociamos con el amor.
Las rosas de tela las podremos presentar como si de una flor natural se tratara o en forma de broche, ramillete, decorando un cojín,…
Material necesario:
– Tela del color deseado
– Cinta métrica (o regla) y tijeras
– Hilo y aguja
Pasos a seguir:
1- Cortar varias tiras de tela de 6 cm de ancho y unos 30 cm de largo.
2- Doblar las tiras por la mitad, longitudinalmente. Ahora medirán 3 cm de ancho y 30 cm de largo, con uno de los laterales «redondeados» (doblados). La parte redondeada o doblada será la parte superior que veremos de la rosa.
3- Empezar con una tira. En una de las esquinas inferiores (la parte redondeada o doblada queda arriba) hacemos unas puntadas, como queramos, para que queden fijas y unidas. A partir de aquí, vamos enrollando la tira a su alrededor.
No lo enrollamos todo de golpe y después fijamos sino que vamos haciendo puntadas de hilo, cada poco, en la parte inferior para fijar la tela. No hay ninguna técnica en concreto y da igual si se nos ve mucho lío de hilos, eso después quedará en el interior o la parte trasera de la rosa.
4- Cuando se acaba la tira con la que habíamos empezado, añadimos otra y procedemos igual. A medida que nos vamos alejando más del centro de la rosa, vamos enrollando de manera más holgada y le podemos dar un poco de vuelta a la tira para que quede menos uniforme y parezca más un pétalo.
5- Cuando consideremos que tiene el tamaño deseado, paramos de añadir tiras y vigilamos para que las últimas puntadas no sean tan visibles.
Una vez tenemos la rosa, podemos añadirle un imperdible detrás, coserla como adorno de otra tela o unirla a otras rosas.
Fuentes de inspiración: Susie Harris, Re-nest y Love and Lavender.