Si un día de estos vais a la playa o al río, desde Tutéate os recomendamos que recojáis piedras, bonitas piedras redondeadas por el agua. Les podemos dar múltiples usos, como un día ya dijimos en «Aprovecha las piedras del camino», pero también las podemos simplemente pintar, adornarlas con lo primero que nos salga de dentro. El proceso nos puede ayudar a relajarnos, como si de un mandala se tratara, o a activar nuestra creatividad, y el resultado puede quedar tan bonito y original que nos sirva para decorar cualquier rincón de casa o centro de mesa.
A continuación os dejamos unos cuantos ejemplos que hemos encontrado por la red de pintura sobre piedras, algunas de pintura libre y otras con intenciones más concretas. Por aquí nos han parecido todas muy bellas, como mensajes que intentan ser transmitidos sin palabras, para quedarse sin que se los lleve el viento y para ser descifrados por el mismo que los crea.
Hay quienes pintan las piedras con marcadores permanentes, con bolígrafos de punta fina o con pinceles delgados y pinturas acrílicas.
Si relaja sólo contemplarlas, imaginad pintarlas… ¿Os animáis a probar?
Fuentes: 6 petals, Apartment Therapy , MagaMerlina, ZamZam Design, Geninne’s Art blog, the caroline johansson, poptart, dorian dew. GardenMama, Artin Red Wagons.