¿Ahorrador o no ahorrador? Parece que últimamente ésta es la cuestión, ¿verdad? Pues aquí, aunque no tengamos nada que ver con el famoso banco que nos lo pregunta (ya nos gustaría…) ¡Somos ahorradores! Bueno, o lo que es mejor… ¡Tuteadores! Porque guardamos nuestro dinerillo en un monedero que no nos ha costado un duro y nos hemos hecho nosotros mismos. ¿Cómo lo veis?
Para que todos podáis hacerlo, hoy en Tutéate os explicamos cómo convertir un tetrabrick en un monedero: un proceso fácil y rápido de obtener una cartera resistente e impermeable. ¿Os animáis a probar?
Material necesario:
– 1 tetrabrick alto con el tapón centrado
– Tijeras y cutter
– Papel y cinta adhesiva decorativa (opcional)
– Grapadora o pegamento (opcional)
Pasos a seguir:
1- Desdoblar las lengüetas del tetrabrick para poder ponerlo todo plano y cortar la parte superior e inferior del mismo.
Ahora es un buen momento para limpiar bien el envase.
2- Plegar los laterales hacia dentro para darle fuelle al conjunto.
3- Doblar el tetrabrick en 3 partes, tal y como muestra la figura.
Hay dos que deben ser iguales, pero la que hace de tapa no es necesario.
4-En la parte que hará de tapa, eliminar la zona frontal con fuelle y realizar un orificio del tamaño del tapón.
5- Si se desea, forrar con un papel estampado para ocultar el diseño e imperfecciones del tetrabrick.
6- Redondear la parte que hará de tapa y cubrir todos los extremos del tetrabrick-monedero con cinta adhesiva de color.
Finalmente, si se desea, se puede fijar todo el conjunto poniendo unas gotas de pegamento (o unas grapas) entre las dos partes-bolsillo del monedero.
Y… ¡Ya está listo para usar!